Elos. Revista de Literatura Infantil e Xuvenil abre plazo para la recepción de propuestas para la sección monográfica de 2024. Además, se recuerda a todas las personas interesadas en enviar sus trabajos que la sección "Miscelánea" se mantiene abierta de manera continua. La información relativa al call for papers de la sección monográfica de 2024 se recoge a continuación:

Call for papers para la Sección Monográfica (2024): “La Edad Media para edades tempranas: el imaginario medieval en la producción literaria dirigida a público infantil y juvenil”

Editores invitados:

  • Lidia Amor (Universidad de Buenos Aires - CONICET)

ORCID: https://orcid.org/0000-0003-4414-4148

  • Juan Manuel Lacalle (Universidad de Buenos Aires - CONICET)

ORCID: https://orcid.org/0000-0002-4162-638X

Justificación temática y teórica

El imaginario medieval ha sido central para la producción de la Literatura Infantil y Juvenil (LIJ) a lo largo del tiempo, desde el influjo que han tenido lo maravilloso y los cuentos de hadas en el relato folklórico, pasando por la identificación del pasado medieval con el origen de ciertas naciones europeas y su consabida identificación con la niñez, hasta el cariz educativo histórico-cultural que se le supone inherente. En los siglos XX y XXI esto se vio potenciado por los mass media audiovisuales, con Disney a la cabeza, y sus géneros y formatos se multiplicaron y expandieron hacia la animación, el cómic y los videojuegos. El estudio de estas narrativas resulta fundamental debido al temprano acercamiento que tienen los niños al Medievo como período y, en algunos casos, a su literatura. Esto implica, por un lado, la vertiente didáctica que puede traer aparejada y, por otro lado, una veta creativa y de ampliación de pensamiento resultante del contacto con relatos asociados a la alteridad. Por otra parte, su configuración oscila entre una construcción del período más romantizada y otra más oscura. Además, en tanto que tiempo también mítico y mitificado, la Edad Media y sus personajes (desde el Cid hasta el concepto de cruzada o los famosos yugos y flechas) han estado en el centro de la LIJ, “campo de batalla para las religiones y las ideologías” (Soriano, 1995, p. 14), por lo que, frente a cualquier falsificación o manipulación, se impone su observación y seguimiento desde perspectivas filológicas, históricas y didácticas. 

En su vertiente más clásica, la novela histórica, o la novela sobre la historia, puede fungir, de la misma manera que las adaptaciones, las antologías o los fragmentos seleccionados, como puente o transición para el conocimiento del pasado y de los clásicos literarios (Bertrand Baschwitz 2008, Fernández-Prieto 2000, Fernández-Tresguerres 2008). El valor didáctico, o la posibilidad de educar de una manera entretenida (Corral 2008, Lagé  Fernández 1993), capital en los defensores del género, sigue estando en el centro de un debate nunca zanjado sobre si se puede aprender de la novela histórica —historia, imaginamos—, si el placer lector debe primar sobre cualquier aprendizaje o si la reflexión literaria sobre el pasado puede alcanzar otras funciones, como una didáctica de los valores, por ejemplo, al evocar la coexistencia entre culturas en la península medieval (Colomer 1992, Fernández López 1997).

Aunque existen algunos trabajos al respecto (Garralón 2004 o Martín Rogero 2008), la bibliografía sigue siendo radicalmente insuficiente para abordar con el rigor que merece esa literatura por la que han apostado una gran parte de los/as escritores/as de mayor prestigio. Muchas de sus obras figuran en la selección de las 100 mejores obras de LIJ del siglo XX elaborada por la fundación Germán Sánchez Ruipérez, así como en toda historia de la literatura infantojuvenil, tal como sucede en la de García Padrino (2018). Se trata, por lo tanto, de una oportunidad inmejorable para solventar una laguna crítica. Nos estamos refiriendo a autores/as tan relevantes como Concha López Narváez, María Isabel Molina, Emili Teixidor, César Mallorquí, Susana Vallejo, Elia Barceló o Laura Gallego, o a títulos no menos célebres como los de Balada de un castellano (1970), Marcabrú y la hoguera de hielo o L’ocell de foc (1972), Endrina y el secreto del peregrino (1987), Finis mundi (1999), La catedral (2000), Cordeluna (2007) o La orden de Santa Ceclina (2008). Recordemos, una vez más, que buena parte de lo que conocemos como literatura ganada o recuperada, pensamos en títulos como Ivanhoe o Robin Hood, no es más que fabulación sobre un Medievo recreado o imaginado.  

  
Líneas temáticas

Para esta sección monográfica se esperan contribuciones que teoricen o analicen las manifestaciones neomedievales vinculadas con el público infantojuvenil, con especial atención a: 

 

  • Historia de la literatura medievalista infantojuvenil; revisiones sobre obras ya clásicas y nuevas propuestas.
  • Falsificación o mitificación del Medievo en la LIJ: visiones, funciones, consecuencias.
  • Adaptaciones de los clásicos medievales (literatura, cómic, cine, etc.) y análisis de manifestaciones narrativas en torno a los clásicos.
  • Experiencias e iniciativas didácticas entre la historia y la literatura neomedieval. ¿Se puede aprender con la novela histórica?
  • Miradas de ida y vuelta: el Medievo en la literatura y la literatura en el Medievo.
  • Papel, función y reconstrucción de la historia en la literatura: LIJ histórica y arqueológica de ambientación medieval.
  • Un Medievo imaginado: visiones fantásticas del Medievo en la literatura infantojuvenil.
  • Edad Media, LIJ y la(s) historia(s) nacional(es).
  • El Medievo para la audiencia más joven: experiencias transmediáticas.
  • Folklore y LIJ de ambientación medieval.
  • LIJ medievalista: la importancia de la ilustración y de otros paratextos.

 

Plazo para el envío de los textos: hasta el 1 de septiembre de 2024.

 

Referencias bibliográficas

Bertrand Baschwitz, C. (2008). La historia de las historias: historia novelada y novela histórica. En S. Montemayor Ruiz (Coord.), La novela histórica como recurso didáctico para las Ciencias Sociales (pp. 9-39). Ministerio de Educación, Gobierno de España.

Colomer, T. (1992). La literatura infantil y juvenil en España (1939-1990). En A. Nobile, Literatura infantil y juvenil (pp. 138-167). MEC-Ediciones Morata.  

Corral, J. L. (2008). ¿Es posible aprender con la novela histórica? La aventura de la historia, 122, 102-106.  

Fernández López, M. (1997). Control ideológico en la novela histórica para jóvenes en España. Amigos del libro, 37, 8-14.  

Fernández-Prieto, S. (2000). Novela Histórica juvenil. Delibros, 133, 42-43. https://doi.org/10.1023/A:1009642619137   

Fernández-Tresguerres, M.ª L. (2008). La novela histórica juvenil. En S. Montemayor Ruiz (Coord.), La novela histórica como recurso didáctico para las Ciencias Sociales (pp. 95-146). Ministerio de Educación, Gobierno de España. 

García Padrino, J. (2018). Historia crítica de la literatura infantil y juvenil en la España actual (1939-2015). Marcial Pons. https://doi.org/10.2307/j.ctvh4zfkj

Garralón, A. (2004). La Edad Media y los peregrinos en la LIJ: una aproximación. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. https://www.cervantesvirtual.com/nd/ark:/59851/bmc765r9    

Lagé Fernández, J. J. (1993). El relato juvenil de tema histórico. CLIJ, 50, 21-29.  

Martín Rogero, N. (2008). Ficción literaria y educación. Lo fantástico medieval en la narrativa juvenil. Didáctica, 20, 191-209.  

Soriano, M. (1995). La literatura para niños y jóvenes. Colihue.

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