This work aims to carry out an exploration of the manosphere through the analysis of the conversational threads of two profiles located in the social-digital network Facebook. It is divided into four parts: the first reconstructs and characterizes the manosphere as one of the most important spaces in the construction of misogyny. The second part defines hate speech and its manifestations in digital environments.
In the third part, the methodology and criteria for the selection of the sample are presented. The fourth part summarizes the main findings and, finally, the conclusions reflect on the findings, in the context of the growth of hate speech in socio-digital networks. It should be noted that Spain and Latin America have a presence in the manosphere, although not as intense and frequent as the groups selected as a result of six months of non-participant observation in five of them, all in English, in which mainly South American men participate. The Latin American groups -one Venezuelan and two more seeking the participation of men from the region- have little influence in the discussion, since the profiles go a long time without being visited and/or updated.
Durante la década de 1980, comenzó a gestarse en Estados Unidos un movimiento a favor de la liberación masculina, impulsado por la creencia de que los hombres blancos estaban en crisis como resultado de la influencia feminista y, más ampliamente, del liberalismo. Este movimiento se tradujo en una reacción violenta hacia el feminismo y en un contra discurso que fue ganando espacios en medios tradicionales y más adelante en digitales que cuestionaba a las “mujeres en el poder”. En este contexto, académicos por los derechos masculinos posicionaron la liberación de los derechos de los hombres como contraparte de la liberación de las mujeres. De acuerdo con este discurso, los hombres eran obligados a ser el sostén de la familia y a llevar la peor carga en la responsabilidad financiera. Se buscaba, en suma, un retorno a los valores masculinos tradicionales y el apoyo de los hombres que se sentían oprimidos por la sociedad y que culpaban de su insatisfacción a las mujeres y sus cada vez mayores derechos. Estos son los antecedentes de los actuales movimientos de liberación masculina: reacciones a la disminución del estatus social como eran percibidos por hombres blancos cisgénero (; ).
Los movimientos de liberación masculina surgieron de manera casi paralela a las configuraciones feministas e imitan sus desarrollos, particularmente en línea. Se centran en la acción de base y el activismo digital para propagar sus causas. Los movimientos masculinistas se caracterizan por un discurso misógino y violento que recurre a la victimización como vía para legitimar su causa. Este es, en suma, el antecedente del escenario que en este momento identificamos como la manosfera, con amplia presencia en Internet a través de foros, sitios web y redes socio-digitales. En este trabajo se propone analizar la participación de los participantes de dos perfiles de Facebook en la construcción de la identidad de este universo. Una construcción, que a su vez influye en sus percepciones y los invita a participar en los debates. El trabajo se divide en cuatro partes: en la primera se proporciona una caracterización general de la manosfera y sus propiedades. La segunda parte es una construcción del discurso de odio partiendo de los objetivos de este trabajo. A continuación, se hace una descripción de la metodología del análisis de los hilos conversacionales en Facebook, seguida de la muestra seleccionada: mundos sociales que ilustran la presencia de los rasgos misóginos que han caracterizado a la manósfera desde el principio. La cuarta parte sintetiza los principales hallazgos para, en la última, presentar las conclusiones acompañadas de una reflexión sobre la extensión de los discursos de odio en las redes socio-digitales
El término fue popularizado por Ian Ironwood durante la primera década del siglo XXI, para describir una recopilación de blogs, grupos de discusión, plataformas de juego y espacios digitales que abordan asuntos diversos sobre los hombres y la masculinidad. La manosfera es un espacio de activismo y molestia por el mal trato a los hombres: ante la pérdida, el desplazamiento y la traición han construido espacios para discutir temas de género. Oscila en un continnum que va desde los más moderados que discuten sobre los derechos del padre y las dudas sobre la prevalencia doméstica y los roles de género hasta los más extremos, que apoyan la normalización de la violación y la violencia sexual. Las críticas se concentran en el feminismo y su efecto social en los hombres y la masculinidad, buscando el retorno a los valores tradicionales y la subordinación de la mujer hacia el hombre. En suma, bajo la bandera de la libertad de expresión diversos grupos comparten nuevas formas de masculinidad, en su mayoría caracterizadas por su misoginia y antifeminismo (; ; ; ).
Los autores consultados para este trabajo coinciden en que las más recientes comunidades en línea son más tóxicas y misóginas que sus antecesoras. Utilizan un lenguaje cada vez más explícito sexualmente, violento, racista y homofóbico, además de irónico y plagado de neologismos. Con ello contribuyen al avance de la “misoginia en red”. Cabe añadir que los buscadores y las políticas algorítmicas reflejan los intereses de sus diseñadores: blancos, heterosexuales y masculinos; en la actualidad la manosfera se ha extendido a Latinoamérica y Asia. El anonimato y la presencia de temas polarizados contribuyen a encontrar a sujetos con intereses y creencias similares. Un rasgo adicional de los grupos actuales es el crecimiento de la presencia de las teorías de la conspiración y de la extrema derecha que se entrelazan con las diatribas antifeministas (; ).
Un tema central que impregna la manosfera es la misandria: los hombres se perciben a sí mismos como víctimas de un mundo injustamente a favor de las mujeres. Para despertar de la misandria y el lavado de cerebro del feminismo, algunos grupos dentro de la manosfera se han apropiado de la metáfora de las píldoras, popularizada por la película Matrix y acorde con las teorías de la conspiración. La píldora azul -administrada por las feministas y/o el sistema liberal- propicia que los hombres de Occidente vivan en la ignorancia. La píldora roja conduce al despertar político de la conciencia masculina, haciendo patente el plan que se oculta tras los movimientos de emancipación e igualdad. Los hombres tienen la opción de quedarse con la píldora azul o tomar la roja para el despertar de su conciencia. Algunos grupos hablan de una tercera píldora: la negra; consumirla muestra la naturaleza de la realidad: el mundo está ordenado en contra de los hombres y a favor de las mujeres (; ). Como se verá más adelante, el tema de las píldoras está presente en las redes socio-digitales tanto para nombrar a las comunidades como en la construcción de las agendas de conversación.
De lo anterior se desprende que la vergüenza y la humillación son esenciales para el poder de la manosfera. Se trata de una victimización que les ha permitido legitimar su discurso y sumar adeptos, así como de resistir la renegociación y redistribución de privilegios. El terreno común es que niegan el derecho de las mujeres a la autodeterminación sexual y rechazan el sistema social que ha surgido de la autodeterminación. Tal como se argumenta el discurso, si las mujeres ganan, los hombres pierden. El rechazo del derecho de las mujeres a la autodeterminación sexual se expresa en términos especialmente extremos en forma de demandas para legalizar la violación. Asimismo, como telón de fondo, está presente la consigna de sacar a las mujeres de la red. En este contexto, la manosfera es un espacio ideal para el reclutamiento. Los hombres que recurren a sus diversos espacios están inseguros de su situación. Esto los convierte en un grupo objetivo ideal para las teorías de la conspiración, la misoginia y la legitimación de la violencia hacia las mujeres ().
Es importante destacar que las comunidades en línea son diversas y están fragmentadas individualmente en un cúmulo de foros y redes socio-digitales y sitios web, donde cohabitan los incels, MGTOWitalic>, redpillers, artistas del ligue, entre otras comunidades. Es frecuente que los participantes crucen los límites entre ellos para incorporarse a diversos grupos. Estas comunidades que integran la manosfera aparentemente son distintas y están interconectadas; operan como una red compartida de ideología misógina, de tal forma que se apoyan mutuamente. Independientemente de su tamaño, las comunidades ejercen un importante poder en Internet, debido a su organización, uso de la red, los términos y condiciones de la comunidad de plataformas, así como la cantidad de tiempo y dinero que dedican a sus movimientos. Sin embargo, no es sencillo precisar qué creen exactamente las distintas comunidades de activistas por los derechos de los hombres. La manosfera es un hervidero de odio contra las mujeres, en el que las agresiones verbales y la misoginia se refuerzan mutuamente como en una cámara de eco (; ).
No hay una sola definición de discurso de odio, aunque el término se ha utilizado con el mismo significado: difamación de grupo, incitación al odio mediante calumnias, insultos, epítetos despectivos. Se busca agitar, incitar o promover sentimientos de odio y hostilidad hacia o entre grupos o clases de personas identificadas con ciertas características asignadas. Es decir, con una posición subordinada a otros, personas cuyas ideas o comportamientos entran en conflicto con el sistema de normas prevaleciente, así como grupos asociados a alguna característica colectiva: raza, color, origen nacional, género, discapacidad, religión u orientación sexual (; ; ). La parte del tema que nos ocupa -el discurso de odio misógino en línea- tiene además una dosis de teorías de la conspiración, sustentadas en la descalificación del discurso científico privilegiando el sentido común (). En este contexto, la polémica contra la igualdad de derechos bajo la forma de foros y comentarios en redes socio-digitales va más allá de la ingesta de píldoras y el vocabulario ofensivo. Es parte de un movimiento más amplio en contra de las mujeres y sus derechos que puede observarse en muchas esferas políticas y sociales. De acuerdo con Liriam Sponholz:
...detectar el discurso de odio requiere tomar en cuenta varios factores: el contenido y la forma, el clima económico, social y político; la posición o status del hablante en la sociedad, la audiencia a la que se dirige; alcance y objetivo del discurso. Dicho brevemente, el discurso de odio no es sobre “las palabras que hieren”, sino sobre el contexto en el que adquieren sentido las acciones simbólicas discriminatorias. En este sentido, el discurso puede verse como un acto de habla: acciones realizadas por enunciados ().
Desde esta perspectiva, la misoginia es la base para la construcción del discurso de odio, que se amplifica, reverbera y construye sentido en la manosfera. Un espacio dentro del web caracterizado por las agresiones verbales a veces cargadas de ironía, a veces en tono cada vez más violento que, usando la victimización como telón de fondo, se traduce en llamados al hostigamiento hacia las mujeres. En otras palabras -partiendo de la descripción de Ironwood- la manosfera es un universo que amplifica estos discursos; las redes socio-digitales abiertas constituyen alternativas para ganar adeptos e invitaciones para explorar mundos más complejos a través de grupos cerrados “solo para hombres”; el universo también tiene presencia en foros en Reddit y 4Chan , así como otros más explícitos ubicados en la web oscura.
Esto se desprende de trabajos previos que han analizado el discurso interconectado de la manosfera y sus vínculos con la misoginia y el discurso en línea (; ); la construcción del discurso antifeminista al interior de este universo (); el apoyo de los algoritmos en las plataformas para orientar al participante hacia los contenidos relacionados, contribuyendo al aumento del tamaño y la interconectividad (); la caracterización a gran escala de la manosfera que muestra la tendencia moderada en las comunidades más antiguas y el incremento reciente de las más tóxicas y misóginas (); la construcción de las identidades masculinas localizadas en las subculturas de la manosfera de acuerdo al discurso que promueven (). Estos trabajos previos han utilizado diversas metodologías que van del análisis del discurso a la etnografía digital; con ello han aportado un conocimiento más cabal de la manosfera y sus habitantes, a la vez que constituyen un reto en materia de nuevos acercamientos al tema.
Tomando en cuenta las aportaciones previas sobre la manosfera, la caracterización construida para este trabajo, y los trabajos previos realizados sobre el discurso de odio, llevamos a cabo un recorrido por distintos perfiles de redes socio-digitales que se enfocan en el tema en Facebook e Instagram. La decisión de optar por la primera red socio-digital obedece a que los grupos misóginos están más activos y hacia ellos enfocamos una observación no participante que permitió ver su actividad, funcionamiento y participaciones para tomar decisiones. Esta última variable fue muy importante en la toma de decisiones, dado nuestro interés en los hilos conversacionales como eje del análisis, dada su relación con la reproducción del discurso misógino.
La mayoría de los grupos recibe el nombre de algún elemento discursivo de este universo misógino: por ejemplo, Red Pill Community, con 12 mil miembros, Cada día más Incel, en alusión a la característica del Involuntary Celibate (celibato involuntario) con 431 seguidores o MGTOW, con 5 mil 600 miembros. Dos hallazgos fueron relevantes para efectos de este trabajo: primero, algunos simpatizantes de la manosfera interactúan en más de un grupo, ya sea mediante el diálogo o -segundo hallazgo- la publicación de materiales provenientes de otras redes socio-digitales o como TikTok, YouTube, Twitter y Facebook. La circulación de estos contenidos contribuye a reproducir el discurso con el que simpatizan y a reforzar la posición de los dos perfiles. Esto constata los hallazgos de sobre la multiplicación de las subculturas al interior de la manosfera y la diversidad de posiciones presentes.
Por otra parte, como ya se hizo notar, en términos de la metodología optamos por el análisis de los hilos conversacionales de dos perfiles de Facebook, mismos que caracterizamos como prácticas digitales, es decir, las acciones concretas que los sujetos llevan a cabo utilizando tecnologías digitales y lenguajes textuales, icónicos, audiovisuales y gestuales para interactuar como miembros de grupos específicos. Se trata además de eventos observables y recolectables que implican propósitos, acciones lugares, tiempos, circunstancias y herramientas para la construcción de discursos (; ). Desde esta perspectiva, el chat digital es una práctica específica que permite el intercambio de signos y símbolos que contribuyen a la construcción de sentidos entre individuos y grupos, dando lugar a acciones rutinarias, definidas y analizables. Caracterizar las participaciones mediante textos escritos en este caso como práctica digital constituye una manera de acercarse al análisis de las interacciones grupales, siguiendo una metodología que permite la sistematización y el análisis de esta práctica.
En consecuencia, de los grupos de Facebook que forman parte de la manosfera fueron seleccionados MGTOW y Red Pill Community, tanto por el tipo de contenido que publican como por el número de participaciones por entrada. Mientras el administrador del primero apenas proporciona detalles sobre su grupo, el redpiller es mucho más explícito en la presentación de su grupo. Como ya también se hizo notar, la decisión fue producto de la observación no participante -que dio cuenta de las temáticas abordadas por sus miembros, congruentes con el discurso de la manosfera- así como por la cantidad de opiniones que se generan por publicación.
La metodología se basa en el análisis de los hilos conversacionales que se generan en Facebook propuesta por , a partir de un trabajo sobre la organización de las conversaciones efectuadas por un grupo de maestros de inglés en India. Consideramos además que se trata de espacios en que se comparten experiencias y emociones. Además, las reacciones de los participantes son un componente importante del análisis del discurso de odio y deben ser tomadas en cuenta por la cantidad y tipo de comentarios rudos que suscitan. (; ). Las conversaciones generadas por las audiencias constan de dos elementos: actualización de estado y comentarios. La primera es condición para que otros usuarios se involucren en la conversación para tejer los comentarios mediante procesos de digresión, cambio, desplazamiento y cierre. La descripción de cada elemento formulada por los autores se acompaña de algunos hilos conversacionales seleccionados para el análisis. Volviendo a la muestra, las conversaciones seleccionadas tendrían que tener estos dos elementos: la actualización tenía que ser sugerente para invitar al participante a unirse a la conversación, mientras que los comentarios tenían que aportar contenido a la actualización y entre sí para generar un diálogo entre los participantes. Los hallazgos se detallan en el siguiente apartado.
En la primera parte de este apartado se presentan los elementos de los hilos conversacionales, ejemplificados con los casos más representativos que encontramos en el trabajo de campo en ambos perfiles. En la segunda parte continúa la presentación de los hallazgos con énfasis en elementos del discurso masculinista de la manosfera, del que se desprende el discurso misógino.
La decisión de los hilos conversacionales seleccionados obedece a la temática abordada de acuerdo al tópico de apertura y a la intensidad de participación. Estos hilos, que constituyen la muestra de análisis, fueron sistematizados y guardados para dar forma al corpus del análisis. Cabe añadir que, si bien el objetivo de este trabajo se centra en el análisis de estos hilos, la perspectiva sobre los grupos seleccionados quedaría incompleta si no se menciona el resto de los objetos digitales que los integran. A pesar de las diferencias entre ambos grupos en los dos están presentes materiales con características similares.
Abundan los memes con temas que van desde el humor -que raya en la burla y en la sátira en las relaciones hombre-mujer-, las lecciones que los padres darían a los hijos sobre cómo tratar a las mujeres (nunca des la llave de tu reino a una mujer), o las responsabilidades del hombre como proveedor. También están presentes los videos importados de Masculinity Platform YouTube (“impulsando la masculinidad y trayendo nuevamente esperanza a la humanidad”) sobre las problemáticas relaciones hombre-mujer después del divorcio o por la edad de ellas. Igualmente, en ambos casos los tópicos como los casos arriba ilustrados tienen mucha mayor participación que los memes, videos y fotografías que completan las prácticas digitales de los participantes. Asimismo, como una particularidad de la escritura digital, están presentes los emoticons, gifs y stickies en su mayoría disponibles para el público en general: nada excepcional que identifique a la manósfera. Se trata de formas reconocidas para expresar las emociones en las redes socio-digitales en ambientes reconocidos como amistosos ().
Otro elemento que se desprende del análisis es la presencia de mujeres en estos perfiles de Facebook. Tratándose de grupos abiertos, en Red Pills y MGTOW hay mujeres que simpatizan con la causa y que no provocan problemas; de lo contrario es posible que sean eliminadas. De hecho, el martes 11 de octubre Tony abrió el tópico en el segundo perfil: recientemente me he enterado que hay mujeres en este grupo; tenía la impresión de que este es un espacio para hombres. Rápidamente el tópico se posicionó y ha sido objeto de varias continuaciones; si bien se argumenta que se trata de un grupo público, los participantes han reaccionado de distintas maneras que evidencian la presencia del discurso masculinista de la manosfera:
Alex contesta: porque no se nos permite tener espacios solo para hombres. Esto es sólo una cosa para las mujeres. Recuerda, todos somos misóginos sin importar lo que digamos o hagamos.
Es muy aventurado deducir de estas opiniones que los participantes ignoran la posibilidad de acceder a espacios en la red oscura, o si no conocen los foros de Reddit. Queda claro, sin embargo, que son novatos apenas explorando la manosfera, toda vez que en los hilos conversacionales no está presente el acceso a grupos similares en Facebook, aunque cerrados. En el contexto del discurso de la misoginia, Internet se contempla como un espacio solo para hombres. De aquí el rechazo a la presencia de las mujeres, a la que se responde con agresiones, algunas basadas en el troleo. Es normal odiar y amenazar mujeres, especialmente a las que están en la esfera pública (; ).
Los ejemplos de hilos conversacionales dan cuenta de la presencia de la misoginia en estos grupos, ya sea abierta o como telón de fondo. La carga se incrementa cuando los tópicos abiertos permiten explayarse contra el feminismo y evidenciar la dosis de conspiracionismo. Por ejemplo, Roy inaugura la conversación: primer paso para derrotar a una mujer: deja de comer cualquier comida que venga de una mujer. Comienzan conspirando con cualquier cosa que entra dentro del cuerpo de un hombre. Tony aporta al tópico: los alimentos vegetales (principalmente favorecidos por mujeres e izquierdistas) son una mierda. Muy poco saludables y procesados, luego carne real. Soy mucho más feliz cocinando filetes en una parrilla y comiéndolos con sal y mantequilla. Es más natural y consistente con lo que nuestros antepasados comieron. Y Ryan: incluso escuché que usan brujería. Mean en la comida para tratar de controlar tu mente.
Pero en la misoginia también es evidente la violencia y la invitación a la violación. Jorge: ¿cómo determinarías si una chica es apta para ser tu novia? Scott: píldora roja, los hombres no tienen novias, estás en la página equivocada. Leo: la remojo en amoniaco y espero a que su crisálida endurezca, entones lo abro con un mazo y hago una prueba de fuego; si sus niveles de ácido están fuera de los parámetros 6.5-7.5 la devuelvo a la naturaleza. ❤️❤️Pete: hermano, fóllatela (SEGURO), si ella vuelve, genial, follártela otra vez; si buscas amistad llévate a un perro. John: ninguna lo es, trátala como a un condón, llénala y luego la destrozas. Se trata de ejemplos de normalización de la violencia contra las mujeres; mensajes sobre qué tan odiadas son ().
Como se comentó en su momento siguiendo a Liriam Sponholz, las reacciones de los participantes son un componente importante del discurso de odio tanto por la cantidad como por el tipo de comentarios generados. Prueba de ello es la exploración de estos dos perfiles en Facebook que participan en la construcción y circulación de estos discursos en la manosfera. En este sentido, hay coincidencias entre autores sobre el papel de la plataforma en la construcción de la identidad colectiva para una negociación dinámica y continua de las emociones. La configuración de Facebook orienta y determina las formas producción y publicación de contenido, así como las formas de interacción de los participantes con este contenido y con otros participantes: las formas en que se mantienen en contacto y se construyen redes para la generación y circulación del discurso de odio. Dicho brevemente, el diseño de la plataforma determina las condiciones del debate público (; ; ).
A lo largo de este trabajo se ha destacado la participación de los miembros de Red Pill y MGTOW en la apertura y continuación de los hilos conversacionales analizados. En este sentido, Facebook propicia la presentación y representación de la identidad propiciando que las prácticas digitales de los usuarios se traduzcan en la formación de colectivos imaginados. Los miembros de estos grupos no se conocen ni se conocerán; sin embargo, los participantes pueden desarrollar lazos de afiliación producto de compartir la misma causa en línea y las mismas emociones digitales que se traducen en reacciones positivas pulgares hacia arriba, corazones, abrazos- que dificultan la deliberación y la adopción de posiciones claras. La deliberación es cada vez más difícil en Facebook por su tendencia a recompensar posiciones toscas, apasionadas, superficiales y extremas que generan “compromiso emocional”, como el discurso de odio (; ; ; ).
Hace aproximadamente cinco años, tras las críticas suscitadas por el papel de Facebook en el triunfo del presidente Donald Trump, su presidente Mark Zuckerberg hizo varias promesas públicas de que se reformaría. Que se frenaría la circulación de notas falsas, de información difamatoria y de discursos de odio, pero no ha ofrecido una evidencia de que así sea. Lo que sí ha sucedido cotidianamente desde entonces es la intervención de algoritmos para filtrar el contenido y de supervisores locales que toman decisiones al respecto. El principal destinatario de estas estrategias es el usuario promedio que ve suspendidas sus cuentas por determinado tiempo acusado de haber incurrido en faltas que no tienen explicación lógica. En contraparte, continúa la circulación irrestricta de discurso de odio y la proliferación de espacios que lo promueven e impulsan (, ).
Las reflexiones previas se llevan a Red Pill y MGTOW como sitios de Facebook representativos del discurso misógino, misándrico e instigador de la incitación a la violencia hacia las mujeres y su legitimación a través de frases como “tratarlas como un condón”, “¿por qué castrarte a ti mismo? “Putas hay por ahí” o “ponlas en su lugar” son ejemplos que se repiten cotidianamente en ambos perfiles. Sin un reporte o una sanción de por medio por parte de las instancias de Facebook. Al respecto afirma que “el discurso de odio puede propagarse si no hay un reporte, ya que las redes socio-digitales no lo monitorean”. De aquí la importancia de vincular las prácticas digitales realizadas por los usuarios con lo que llaman nexos de práctica: una configuración de herramientas y acciones con varias conversaciones e historias entrelazadas que se reúnen para formar secuencias reconocibles de acciones y para poner a disposición de los actores identidades sociales reconocibles ().
Visto así, Red Pill, MGTWOW y otros espacios similares son simultáneamente perfiles de Facebook y nexos de práctica: los usuarios no necesariamente los identifican por difundir discursos de odio y sí por las secuencias y acciones con las que se identifican, ya sea por su visión del mundo, o porque les despierta simpatía, o más directamente por sus sentimientos y emociones hacia las mujeres. En este sentido, las conversaciones tienen a la polarización como telón de fondo en un ambiente ontológicamente complejo, donde las redes sociales desafían los límites convencionales entre lo privado y lo público, lo individual y lo colectivo ().
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Gutiérrez, L. (2021). Breve ontología del simp. En Tierra Adentro https://www.tierraadentro.cultura.gob.mx/breve-ontologia-del-simp/.
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Horta Ribeiro, M., Blackburn, J., Bradlyn, B., De Cristofaro, E., Stringhini, G., Long, S., Greenberg, S., & S. Zannettou. (2021). The Evolution of the Manosphere across the Web Proceedings of the International AAAI Conference on Web and Social Media,15(1), 196-207. Retrieved from https://ojs.aaai.org/index.php/ICWSM/article/view/18053.
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Ruocco, J. (2020). Cómo la extrema derecha se apoderó de 4 chan. Nueva Sociedad. https://nuso.org/articulo/como-la-extrema-derecha-se-apodero-de-4chan/.
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[*] Claudia Benassini es profesora e investigadora en la facultad Mexicana de Arquitectura, Diseño y Comunicación, Universidad La Salle Ciudad de México. Investiga las prácticas digitales de los participantes en las redes sociales y su relación con los ecosistemas a los que se adscriben.
[1] De acuerdo con los primeros rastros de la manosfera en Internet datan de la década de 1990, cuando aún no recibía este nombre. En los grupos de noticias Usenet y los primeros blogs de principios del siglo XXI participaba un núcleo demográfico típico del momento: hombres blancos, educados y expertos en tecnología, que se manifestaba en contra del feminismo. A partir de 2010 estos grupos se han extendido hacia las redes sociales con la consecuente expansión del movimiento.
[2] Corresponden respectivamente a los acrónimos de Involuntary Celibate y Men Going their Own Way, dos de los grupos más representativos de la manosfera.
[3] Apoyado en investigaciones recientes, afirma que estas comunidades están creciendo y que sus miembros tienden a migrar de grupos periféricos menos extremos hacia grupos más tóxicos y potencialmente violentos. La expresión en línea de los participantes se vuelve más tóxica a medida que hacen esta migración
[4] Particularmente en 4Chan encontrará una proliferación de discursos de odio que van desde los memes hasta la extrema derecha pasando por los Redpills. El sitio se reconoce por el manejo de la ironía para el tratamiento de estas temáticas (). En Reddit fue muy visitada la comunidad The Red Pill, fundada en 2012 bajo la promesa de “debates sobre estrategia sexual en una cultura que carece cada vez más de una identidad masculina positiva”. Cuando Reddit la prohibió cinco años después “por su contenido tóxico, deshumanizador y amenazante” contaba con casi 300 mil suscriptores ()-
[5] Por ejemplo, Cómo determinar un hombre y una mujer de alto valor, en el que se contraponen lo sentimientos del hombre a los intereses económicos de las mujeres; Las virtudes de la masculinidad, del que se proporciona el enlace, pero es contenido cerrado. Beyond the red pill, que da cuenta de las etapas por las que atraviesan los hombres al ingerir la píldora roja; o la forma en que el psicólogo canadiense Jordan Peterson aniquila a las mujeres.
[6] “Manténganlo civilizados y limpios chicos. Sin troleos. Deja que la gente se una si quiere, pero no dejemos secuestrar gente en el grupo. Si no te gusta el Grupo, es bastante fácil irse. Que tengas un buen día”. Se trata además de un llamado que hace cuando es necesario mediar en caso de que las discusiones suban de tono.
[7] Red Pill es el conocimiento que despierta a los hombres a su masculinidad y les informa de la verdadera naturaleza (hipergamia) de las mujeres. (...) El punto es que hay muchos hombres en este grupo con diferentes creencias y experiencias. Lo que hagas con este conocimiento depende de ti. Así que por favor no avergüences a los hombres que tienen relaciones o a los hombres que prefieren permanecer solteros. Todos estamos aquí para aprender y mejorar. (Abreviado por razones de espacio; se presentan los argumentos más relevantes).
[12] Simp es el acrónimo de “Sucker Idolising Mediocre P*ssy”: un hombre que ofrece su devoción, tiempo y dinero a una mujer que no le da nada a cambio ().
[16] “Las mujeres se tallan los ojos cuando despiertan porque no tienen bolas para tallarse”; “las chicas usan (ropa marca) carhartt como si fueran obreros. Tomar tubería y colocar tubería son dos cosas diferentes, Stephanie. Las mujeres reales dan su cheque de pago completo a su hombre y ganan una pensión.”
[17] “Las mujeres, los niños y los perros son amados incondicionalmente. Un hombre sólo es amado bajo la condición de que proporcione algo.”
[18] No obstante, Lisa Sugiura afirma que la manosfera también tiene grupos de mujeres. “Las esposas tradicionales apoyan y practican los valores domésticos tradicionales, con un anhelo nostálgico mutuo de volver a tiempos más simples, cuando hombres y mujeres conocían su lugar, hombres, como sostén de la familia y mujeres como amas de casa y un rechazo al feminismo” ().
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