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Elba Maneiro Crespo
Universidade de Santiago de Compostela
España
https://orcid.org/0000-0001-8311-2224
Serafín González Quinzán
Universidade de Santiago de Compostela
España
https://orcid.org/0000-0002-7746-5944
Gemma Vicente Iglesias
Universidade de Santiago de Compostela
España
https://orcid.org/0000-0002-2696-4452
Vol. 22 Núm. 1 (2023), Artículos
DOI: https://doi.org/10.15304/rips.22.1.9037
Recibido: 14-02-2023 Aceptado: 12-04-2023 Publicado: 27-06-2023
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Resumen

La creciente polarización política, el auge de los partidos de extrema derecha o la crisis catalana; son tan solo algunos de los ejemplos más recientes en los que podemos observar el ya incuestionable rol de las emociones en nuestra realidad política. De la mano del desarrollo de la psicología política, las emociones se han venido interpretando como una variable explicativa más del comportamiento político. Eso sí, la huella de ese dominio de la perspectiva psicológica se ha plasmado en un concepto de emoción básicamente individual y reactivo. Nos preguntamos si esta forma de acercarnos hasta la compleja relación política-emociones es la más adecuada. Aquí buscamos recuperar algunas de las ideas clave de la óptica constructivista de las emociones y conjugarlo con el análisis contemporáneo de las mismas. Abordamos las emociones como el fenómeno a explicar e identificaremos los elementos configuradores del proceso de construcción emocional. Presentaremos cuatro modelos de ecuaciones estructurales donde testaremos los elementos aquí propuestos como constitutivos de la emoción. Las emociones analizadas (odio y miedo) serán las dirigidas hacia los dos principales líderes políticos (Pedro Sánchez y Pablo Casado) en el contexto posterior a las Elecciones Generales de España del 10 de noviembre de 2019.